Llamada A La Obediencia - El Secreto Ha Sido Desucierto Reimar Schultze

“el misterio que había estado oculto desde los siglos y edades, pero que ahora ha sido manifestado a sus santos, a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria” (Colosenses 1:26-27).

El apóstol Pablo hable en este pasaje de un misterio ha estado oculto desde la creación del mundo. ¿Qué es un misterio? El Nuevo Testamento griego usa la palabra musterion que quiere decir secreto.

Dios tuvo un secreto y lo guardo desde el principio hasta los días de la vida de Pablo. Fue el secreto mas oculto de toda la historia y fue guardado por más tiempo que cualquier otro. Más importante que todo, fue el secreto más sagrado.

Quedo maravillado al pensar en el control que ejerció Dios al mantener el secreto por tanto tiempo. Ni Moisés, ni Elías, ni David, ni Isaías tuvieron el privilegio de saber el secreto. Dios mantuvo el secreto durante la caída del hombre en el Edén. Lo mantuvo durante el diluvio y el éxodo de Israel. Aun cuando su pueblo fue cautivo en Babilonia, Dios nunca reveló el secreto. ¿Podrías tu guardar un secreto así?

Todavía recuerdo cuando llevé a mi familia a las Montañas Rocky. En una conversación con otro turista el hombre me pregunto, “Tienes el evangelio entero?” Respondí, “Claro. Nunca he conocido una persona que solo tiene parte del evangelio.” Mi respuesta sorprendió al hombre, pero el significado de mi respuesta fue que si Cristo vive en nosotros, tenemos el evangelio entero. Es imposible tener a Cristo pero solo una mitad o un cuarto de la verdad del evangelio. Cristo y el evangelio son inseparables. Predicar el evangelio sin dirigir el oyente a Cristo es como un tren que nunca llega a su destino. Si no llegamos a este fin, vivimos continuamente con nuestro pecado. “Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos” (Gálatas 5:24).

Quizás tu eres un miembro fiel de tu iglesia o te consideras una persona buena que ora y lee la Biblia diariamente. A pesar de estos buenos hábitos, no tienes nada si no tienes a Cristo. Cristo es el elemento central e indispensable de la fe cristiana. “a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria” (Colosense 1:27).

¿Que significa tener a Cristo en nosotros?

Tener a Cristo en tu vida significa que el mismo Jesús que vivió hace dos mil años ahora vive en ti. Solo cuando tenemos esta perspectiva podemos entender esta verdad. I Juan 3:9 dice, “Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.”

El hecho de tener a Cristo en nosotros no previene la tentación, pero si nos ayuda a resistirla. La tentación en si no es pecado. Jesús mismo fue tentado, pero nunca cedió. Nunca permites que el diablo te diga que si fueras más espiritual no serías tentado. De cierto, las personas más santas son las que enfrentan la mayor tentación y si caen reconocen su error inmediatamente.

La vida recta es nada más y nada menos que vivir en acuerdo con la voluntad de Dios. Mientras obedecemos al Señor él obra en nosotros y su gracia permanece en nosotros.

“Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros” (I Corintios 4:7).

Pregúntame quien es la persona mas rica en todo el mundo y te diré que es el Cristiano. Ninguna otra persona tiene más riqueza de espíritu. Es verdad que bajo el criterio del mundo el cristiano es pobre, pero la verdad es que el cristiano posee riquezas que el mundo no comprende. El hecho de tener a Cristo en nosotros nos convierte automáticamente en la persona más rica del mundo.

La riqueza mundana es temporal. Se pierde fácilmente, pero la riqueza espiritual esta fundada en Cristo. Cuando pasas por tribulación, piense en tus riquezas espirituales. Cuando Pablo dijo que tenemos nuestro tesoro en vasos de barro continuó diciendo, “estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados” (v. 8). La presencia de Cristo en nosotros alivia nuestros problemas y trae luz en medio de las tinieblas.

“y de Cristo, en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y el conocimiento” (Colosense 2:2-3).

El tesoro de Cristo en nosotros es algo de la cual los profetas nunca soñaron. A pesar de toda su sabiduría, nunca acabaron de aprender más de Cristo. Así será contigo cuando empiezas a explorar los misterios de Dios. Nunca llegarás al fin de tu jornada.

Encontrarás dos cosas muy importantes: conocimiento y sabiduría. “Porque la sabiduría de este mundo es insensatez para con Dios; pues escrito está” (I Corintios 3:19). La sabiduría del cristiano no es de este mundo – se encuentra en Cristo. Es sabiduría y conocimiento divino. El que está todavía en el mundo se siente desorientado y sin dirección, pero el cristiano sabe su destino y su propósito.

“Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros” (Efesios 3:20).

Lo que Cristo puede hacer en nosotros es más de lo que podemos entender. No puede ser medido. El poder que posee el cristiano por medio de Cristo es infinito. El cristiano es la persona mas poderosa y hasta el poder de los profetas del antiguo testamento no compara con el poder del cristiano humilde. Este poder viene del tesoro que tenemos en vasos de barro.

El cristiano tiene el poder de la esperanza y el poder de la resurrección. Tiene el poder para vivir como Cristo vivió y tiene el poder de la paciencia y el gozo. Tiene poder para presentarse ante Cristo sin falta.

un cristiano y te mostraré una creación maravillosa. Si no eres ya cristiano, ¿no te interesa aceptarle hoy?